La Diabetes

Recuerda
  • La diabetes es causada por la falta de insulina.
  • La insulina es una hormona que ayuda a convertir la glucosa (proveniente de la comida que ingieres) en energía.
  • Los adolescentes con diabetes pueden hacer actividades normales con la dieta, ejercicio y medicación correcta.
  • This guide in English

blood glucose monitorLa diabetes es una enfermedad crónica (a largo plazo) que ocurre cuando tu cuerpo no produce suficiente insulina o cuando tu cuerpo tiene problemas para usar la insulina que produce. 210.000 jóvenes viven con esta enfermedad en los Estados Unidos.

¿Qué es la insulina? ¿Por qué es importante?

La insulina es una hormona producida por una glándula llamada “páncreas”. El páncreas está localizado detrás del estómago.

Cuando comes, tu cuerpo digiere la comida (la descompone) y la convierte en vitaminas, minerales, azúcares (llamadas “glucosa”), grasas y proteína. Luego tu cuerpo usa la glucosa para obtener energía. La glucosa es la mayor fuente de energía del cuerpo. La insulina es la hormona que ayuda a la glucosa a entrar a las células de tu cuerpo para que pueda ser usada como energía.

Si tu cuerpo no produce suficiente insulina o si tu cuerpo tiene dificultades para usar la insulina que produce, la glucosa de tu comida no será transformada en energía. En su lugar, la glucosa se mantendrá en la sangre y ocasionará que la glucosa en la sangre (también llamada “azúcar en la sangre”) aumente.

¿Por qué es un problema tener mucha azúcar en la sangre?

Un alto nivel de azúcar en la sangre es un problema debido a que provoca daños graves al cuerpo. Algunos de los problemas a largo plazo más graves son la pérdida de la visión, problemas renales, enfermedades cardíacas, daños en la circulación y derrames cerebrales. Este tipo de daño se produce lentamente a través de los años y puede ser retrasado o prevenido si se atiende bien la diabetes.

También hay problemas a corto plazo derivados de poseer niveles altos de azúcar en la sangre.

Algunos de los problemas a corto plazo más comunes (ocasionados por un alto nivel de azúcar en la sangre) son:

  • Sentirse sedienta
  • Tener que orinar más seguido
  • Sentirse irritable o exhausta
  • Pérdida de peso

Si la azúcar en la sangre se eleva demasiado debido a la falta de insulina, puedes experimentar una enfermedad muy grave llamada *”cetoacidosis diabética”.

Los síntomas de la cetoacidosis son:

  • Respiración profunda y rápida
  • Dolor estomacal, dolor de pecho o vómitos
  • Confusión
  • Pérdida de conciencia (coma)

*La cetoacidosis diabética es una enfermedad mortal y requiere tratamiento médico de emergencia.

Si dejo de ingerir alimentos azucarados, ¿desaparecerá mi diabetes?

No. La glucosa que tu cuerpo usa para obtener energía proviene de muchos tipos de alimentos, no solo de alimentos azucarados. De hecho, la mayor fuente de glucosa para el cuerpo no proviene de la azúcar en absoluto, sino de alimentos como cereales, pan, arroz, pasta y otros granos. Estos alimentos son llamados carbohidratos. Los productos lácteos, las frutas y los vegetales también contienen carbohidratos.

Los carbohidratos son necesarios para darle al cuerpo suficiente energía para afrontar el día a día. Por esta razón, es importante para ti comer una dieta balanceada que incluya cantidades moderadas de alimentos que contengan carbohidratos.

¿Cómo contraigo diabetes?

Los dos tipos de diabetes más comunes son el tipo I y el tipo II.

La diabetes tipo I es el tipo de diabetes más comúnmente encontrado en los jóvenes. La diabetes tipo I es una enfermedad autoinmune causada por el sistema inmunológico del cuerpo (la parte del cuerpo encargada de combatir las enfermedades) que ataca las células del páncreas que producen insulina. Hay algunos genes (información en tus células que usualmente vienen de los padres) que hacen que una persona sea más propensa a desarrollar diabetes tipo I. Incluso si tienes genes que te hagan más propensa a contraer diabetes, es probable que todavía tenga que acontecer otro evento que estimule y “active” el sistema inmunológico. Luego el sistema inmunológico se encargará de atacar y destruir las células beta (células encargadas de producir insulina) del páncreas. Esto provoca que el cuerpo deje de ser capaz de producir insulina por su cuenta y que contraigas diabetes tipo I.

Una vez que desarrollas diabetes tipo I, nunca desaparece. En estos momentos, no hay cura para la diabetes. Para mantenerte saludable, debes tomar inyecciones o usar una bomba de insulina todos los días para poder absorber la azúcar en tu comida. Las personas con diabetes tipo I pueden vivir una vida larga y sana si toman su insulina y mantienen sus niveles de azúcar bajo control.

La diabetes tipo II es más común en adultos, pero ahora hay más adolescentes con diabetes tipo II que nunca. Se contrae diabetes tipo II cuando desarrollas “resistencia a la insulina”, lo cual significa que tu cuerpo necesita cantidades de insulina más altas de lo normal debido a que no puedes usarla eficientemente y a que no eres capaz de producir suficiente insulina extra para mantener normal la azúcar en la sangre. Eres más propensa a desarrollar diabetes tipo II si tienes un historial familiar de diabetes y sobrepeso.

Normalmente, cuando padeces diabetes tipo II, puedes mantener tus niveles de azúcar bajo control siguiendo una dieta saludable, haciendo ejercicio y tomando pastillas que ayuden a tu cuerpo a producir más insulina o a hacer un mejor trabajo usando la insulina que produce. Algunas veces, la diabetes tipo II también puede necesitar inyecciones de insulina para mantener sus niveles de azúcar bajo control.

¿Cuáles son los síntomas más comunes de la diabetes Tipo I?

Algunos síntomas de la diabetes son:

  • Estar extremadamente sedienta
  • Tener que orinar muy seguido
  • Pérdida de peso (incluso cuando comes más comida de lo usual)
  • Náuseas o vómitos
  • Cansancio

Muchos adolescentes con diabetes tipo II no tienen síntomas, la cual es la razón por la que, si tienes sobrepeso y estás en riesgo de padecer diabetes, tu médico realizará pruebas de laboratorio para detectarla cada dos años.

¿Cómo se diagnostica la diabetes?

Los doctores pueden diagnosticar la diabetes a través de exámenes de sangre o de orina.

¿Cómo puedo mantener mis niveles de azúcar bajo control?

Las personas con diabetes tipo I deben mantener sus niveles de azúcar bajo control tomando inyecciones de insulina o usando una bomba de insulina. Esto es debido a que tu cuerpo no puede producir su propia insulina. También es muy importante seguir una dieta saludable para poder mantener tus niveles de azúcar en la sangre bajo control.

En el caso de las personas con diabetes tipo II, una dieta saludable, ejercicio frecuente y medicamentos orales (pastillas) suelen ser suficientes para mantener su azúcar en la sangre en un nivel saludable.

¿Cómo puede tomar insulina?

Hay muchos tipos diferentes de insulina y distintas formas de tomarlas.

La “insulina de acción rápida” comienza a actuar bastante rápido y solo se mantiene en tu cuerpo por unas pocas horas. La “insulina de acción prolongada” necesita varias horas para comenzar a actuar y se mantiene en tu cuerpo por hasta 24 horas. Puede que necesites tomar solo un tipo de insulina o también puedes necesitar una combinación de insulina de acción rápida y prolongada.

Las opciones de cómo que puedes tomar insulina incluyen:

  • Jeringas desechables (agujas)
  • Una pluma de insulina: La pluma de insulina luce como un bolígrafo grande. Está lleno de insulina y se usa con agujas de jeringas desechables.
  • Una bomba de insulina: “La bomba” libera insulina de forma continua justo debajo de la piel. Es un dispositivo pequeño (similar al tamaño de un bíper) que usas todo el día. Libera insulina a lo largo del día a través de un pequeño catéter programado con tasa basal, la cual sustituye una inyección de insulina de acción prolongada. La bomba también es usada para administrar insulina de acción rápida para las comidas y para corregir los niveles de azúcar en la sangre. La mayoría de los jóvenes con diabetes eligen usar una bomba porque sienten que les brinda más libertad que los otros métodos.

Tu médico y tú trabajarán juntos para encontrar la terapia de insulina que mejor se adecúe a ti. Un miembro de tu equipo médico te enseñará la forma correcta de usar el método que escojas.

¿Debo seguir una dieta especial?

Es importante comer una dieta sana y balanceada tanto si padeces diabetes tipo I como si padeces diabetes tipo II. Trabajarás junto a tu médico y usualmente junto a un dietista para poder escoger un plan alimenticio que se ajuste a ti. Aprenderás sobre los diferentes alimentos que afectan la azúcar en tu sangre y sobre cómo elegir alimentos que la mantengan en un nivel saludable todo el día.

¿Y qué hay del ejercicio?

El ejercicio es una parte importante para mantener tu cuerpo y tu azúcar en la sangre en un nivel saludable. Tu médico trabajará contigo para desarrollar un plan de ejercicio. Es importante hablar con tu médico con respecto a los deportes y el ejercicio debido a que estos pueden tener un gran efecto en la forma en que tu cuerpo usa la insulina y, también, en tu azúcar en la sangre. Algunas veces, las personas que toman insulina pueden tener bajos niveles de azúcar en la sangre durante y luego de realizar ejercicio.

¿Cómo puedo medir mis niveles de azúcar en la sangre?

Necesitas medir tus niveles de azúcar en la sangre varias veces al día usando un dispositivo especial llamado “medidor de glucosa” (o “glucómetro“.) Tu medidor de glucosa te dirá si tus niveles de azúcar en la sangre están muy altos, muy bajos o dentro de tu rango ideal, midiendo la cantidad de azúcar en una pequeña muestra de sangre. La muestra de sangre es tomada punzando tu dedo o la parte interna de tu brazo con una aguja muy delgada llamada “lanceta”.

Tu médico te enseñará cómo usar tu medidor de glucosa y cómo mantener el registro de tus niveles de azúcar en un diario o una aplicación que llevarás contigo a tus citas médicas. Mantener el registro de tus números te ayudará a ti a tu médico a percibir los cambios en tus niveles de azúcar en la sangre a través del tiempo. Esto puede ayudarte a notar cualquier patrón en tus niveles de azúcar, lo cual puede ayudarte a ti y a tu doctor a decidir si necesitas realizar ciertos cambios en tu dosis de insulina.

Algunas personas con diabetes usan un medidor de glucosa continuo que mide los niveles de glucosa en la capa de la piel cada varios minutos a lo largo del día.

¿Qué sucede si mis niveles de azúcar en la sangre están muy altos?

Habla con tu médico acerca de lo que debes hacer si tu nivel de azúcar está demasiado alto (esto es llamado “hiperglicemia”). Puede que necesites tomar una inyección adicional de insulina o, si tus niveles de azúcar están extremadamente altos, puede que necesites asistencia médica.

¿Qué sucede si mis niveles de azúcar en la sangre están muy bajos?

Si tus niveles de azúcar en la sangre están muy bajos (esto es llamado “hipoglicemia”), necesitas comer o tomar un poco de azúcar para “elevar” tus niveles de azúcar. Puede que tengas tabletas de glucosa para este propósito o puede que tengas una bebida azucarada como refresco o jugo. Siempre deberías llevar contigo una fuente de azúcar en caso de que tus niveles de azúcar en la sangre desciendan.

Si tus niveles de azúcar están muy bajos, puedes desmayarte y necesitarías asistencia médica de emergencia. Por esta razón siempre deberías llevar una carta o usar un brazalete o collar que les haga saber a las personas que tienes diabetes. Esto puede ayudarte a obtener el tratamiento apropiado de inmediato.

Algunos síntomas de niveles bajos de azúcar en la sangre son:

  • Tiritar
  • Mareos
  • Sudor
  • Confusión
  • Piel de color pálido
  • Torpeza
  • Ritmo cardíaco rápido

Si sientes que tienes bajos niveles de azúcar en la sangre, pero no puedes medirlo, deberías tomar una tableta de glucosa o tomar un poco de refresco o jugo solo para estar segura. Luego puedes medir tus niveles de azúcar a la mayor prontitud posible. Es importante atender los niveles bajos de azúcar inmediatamente.

¿Qué es el “periodo de luna de miel” en la diabetes?

Aunque la diabetes nunca desaparece, muchas personas con diabetes tipo I experimentan un “periodo de luna de miel” poco después de descubrir que tienen la enfermedad. Durante este tiempo, el cual usualmente dura entre unos pocos meses y un año, una persona puede necesitar menos insulina para tener niveles de glucosa en la sangre normales. Esto es debido a que el cuerpo todavía está produciendo algo de insulina.  A medida que la diabetes progresa, la persona producirá cada vez menos insulina hasta que el cuerpo deje de producirla por completo. En este punto necesitarán depender de dosis de reemplazo de insulina completas.

¿La diabetes es grave?

La diabetes es grave debido a que nunca desaparece y debido a que debes cuidarte apropiadamente para mantenerte sana. Sin embargo, eso no significa que no puedas tener una vida normal. Las personas con diabetes pueden hacer casi todo lo que una persona sin diabetes puede hacer. Solo necesitas tener mucho cuidado con tu dieta, ejercicio y medicamentos de manera en la que las otras personas de tu edad no necesitan.

Cuanto más tiempo tengas diabetes, mayor será el riesgo de padecer ciertas enfermedades, tal como enfermedades cardíacas, deficiencias en la visión, enfermedades renales y problemas circulatorios. Cuanto mejor mantengas tus niveles de azúcar en la sangre bajo control, más posibilidades tendrás de retrasar o prevenir estos problemas cuando seas mayor.

¿Quién puede ayudarme a controlar mi diabetes?

Se necesita un equipo médico para atender la diabetes. En casa, necesitas trabajar junto a tus padres o los adultos con los que vivas para asegurarte de que obtienes tus inyecciones de insulina, controles tus niveles de azúcar en la sangre y comas regularmente. En la escuela, la enfermera de la escuela puede ayudarte. Las enfermeras, doctores, nutricionistas y consejeros que te ayudan a cuidar tu diabetes también son parte de tu equipo. Deberías sentirte cómoda hablando con cualquiera de ellos sobre las preocupaciones que puedas tener.

¿Qué más necesito saber?

  • Es importante que hagas tu mejor esfuerzo para mantener tu cuerpo saludable y tus niveles de azúcar bajo control. Para los jóvenes, esto puede ser un desafío. Algunas veces, los cambios hormonales en la pubertad pueden dificultar mantener tus niveles de azúcar en la sangre bajo un control estricto y esto puede ser frustrante. También puede ser frustrante tener que preocuparse mucho en la comida y tu azúcar en la sangre cuando que las otras personas de tu edad no tienen que preocuparse por eso.
  • Si te sientes abrumada, hay recursos disponibles que pueden ayudarte a sobrellevar tu diabetes. Puede ser de ayuda hablar con alguien que entienda lo que estás viviendo. Tu médico o tus padres pueden ayudarte a encontrar un consejero o un grupo de apoyo en tu comunidad.
  • Recuerda que mantenerte sana incluye evitar el tabaco y el alcohol. Esto es importante para todos los adolescentes, pero especialmente para los que tienen diabetes. Fumar puede causar graves daños a tu circulación y beber alcohol puede ocasionar que tu azúcar en la sangre baje a niveles peligrosos.
  • Si tienes diabetes y eres sexualmente activa, asegúrate de usar un método anticonceptivo efectivo para que no tengas un embarazo no deseado.
  • Si te embarazas, necesitarás prestar mucha atención a tu diabetes y medir tus niveles de azúcar en la sangre frecuentemente. Usualmente, la insulina necesita ser ajustada más frecuentemente durante el embarazo. Esto es importante tanto para la salud de la madre como para la del bebé.
Asegúrate de ir al médico regularmente para discutir tu progreso. Si trabajan juntos en cuidar tu diabetes, puedes aspirar a vivir una vida normal y saludable.

Our health guides are developed through a systematic, rigorous process to ensure accuracy, reliability, and trustworthiness. Written and reviewed by experienced healthcare clinicians from Boston Children's Hospital, a Harvard Medical School teaching hospital and consistently ranked as a top hospital by Newsweek and U.S. News & World Report, these guides combine clinical expertise, specialized knowledge, and evidence-based medicine. We also incorporate research and best practices from authoritative sources such as the CDC, NIH, PubMed, top medical journals, and UpToDate.com. Clinical specialists and subject matter experts review and edit each guide, reinforcing our commitment to high-quality, factual, scientifically accurate health information for young people.